recoger la luz no visible (luz que no podemos ver con nuestros ojos) del espacio es una tarea complicada. Si nuestro telescopio está en tierra, entonces los datos del espacio pueden mezclarse con datos de nuestra atmósfera. Para evitar esto, los astrónomos enviaban globos a gran altura en la atmósfera con equipo a bordo para estudiar el espacio. ¡Uno de estos globos alcanzó una altura de más de 50 km!