Durante su misión de cinco años Gaia observará 1000 millones de estrellas, unas 70 veces cada una de ellas. ¡Esto significa que estudiará unos 40 millones de estrellas al día!
Muchas tribus antiguas creían que la Tierra estaba encerrada dentro de una cúpula gigantesca, por la que las estrellas viajan cada noche.
Con el tiempo, nos dimos cuenta de que las estrellas están realmente muy lejos, repartidas por toda la galaxia de la Vía Láctea o más lejos. No se mueven por el interior de una gran bola, como podría parecer.
Sin embargo, esta idea antigua es todavía útil. Hoy en día llamamos a la cúpula “esfera celeste”, y nos proporciona un modo sencillo de crear mapas del Universo.
Realizando este tipo de mapa ignoramos los lejos que se encuentran las estrellas. En cambio, imaginamos que todo lo que vemos en el cielo está colocado en el interior de una enorme bola que rodea la Tierra, tal como hacían los pueblos antiguos.
Esta imagen oval podría parecer un huevo de Pascua bellamente decorado, pero representa el cielo completo. Esta imagen es, de hecho, un mapa que muestra cómo el satélite Gaia rastreó el cielo durante sus primeros 14 meses de trabajo.
Para conseguir su misión y cartografiar por entero la Vía Láctea, Gaia gira lentamente en el espacio, barriendo con sus dos ojos el cielo entero siguiendo círculos gigantes. La nave espacial rota cuatro veces al día, además de estar moviéndose alrededor del Sol, lo que significa que ¡explora partes diferentes del cielo cada día!
Los colores nos indican la frecuencia con que Gaia miró diferentes áreas el cielo. Las regiones que exploró más a menudo están mostradas en azul; las áreas a las que Gaia ha prestado menos atención están pintadas de color melocotón.
Durante su misión de cinco años Gaia observará 1000 millones de estrellas, unas 70 veces cada una de ellas. ¡Esto significa que estudiará unos 40 millones de estrellas al día!